[Solo he tardado medio año —literalmente— en actualizar esta cosa. Tienen permiso para aplaudir.]
En esta ocasión voy a reseñar Pregúntale al polvo, una novela del escritor estadounidense —de raíces italianas— John Fante (Denver, 1909 - Los Ángeles, 1983). Fue publicada originalmente en 1939 bajo el título Ask the Dust. Es la segunda de las novelas protagonizadas por Arturo Bandini, una especie de alter ego del propio escritor. Es su novela más popular. Tal vez no esté de más añadir que cuenta con una adaptación cinematográfica del 2006, protagonizada por Colin Farrell y Salma Hayek; al parecer, deja bastante que desear.
Los Ángeles, años treinta. El joven aprendiz de escritor Arturo Bandini lucha por la dura supervivencia diaria, mientras sueña con el triunfo artístico y económico. Arturo proclama que es un genio de las letras, mientras se enfrenta a una compleja relación amorosa con Camila, una chica mexicana que trabaja como camarera.
Vaya por delante que es una novela sobre la que no tengo gran cosa que decir, pero intentaré que resulte una reseña decente. Pues bien, el argumento es bastante simple y se resume en la sinopsis que he añadido. Arturo Bandini vive en un motel de Los Ángeles y se dedica a escribir y a buscarse la vida como buenamente puede. Es un personaje con el que no es fácil simpatizar y empatir del todo por su manera de vivir y por su manera de ser (es un tanto prepotente, muy inestable, tiene algunos ademanes racistas, etc.). Un día conoce a Camila, una camarera mexicana, y digamos que ahí es donde empieza realmente la novela. De hecho, el inicio de la novela me ha parecido bastante insulso y hasta un poco tedioso, pero considero que va cogiendo temperatura con el paso de los capítulos. Vamos, en líneas generales, creo que Pregúntale al polvo va de menos a más.
La relación entre Arturo y Camila es bastante peliculera, no me parece demasiado realista, aunque me cuesta ponerme en la piel de dos jóvenes de Los Ángeles en los años 30. Así que cabe la posibilidad de que la relación amor-odio de ellos dos esté en sintonía con esa coyuntura. Me cuesta creerlo, pero puede ser. Por ejemplo, Arturo se refiere a Camila como una chica no atractiva pero más tarde dirá que es hermosísima. Tampoco quedan muy claros los sentimientos de él hacia ella, aún menos los de ella hacia él. De hecho, el comportamiento que arrastran ambos —especialmente ella— durante toda la novela es notablemente errático. Alguno podría decirme que la relación Arturo-Camila no es peliculera, sino que es compleja. Bueno, es una forma de verlo, pero entonces es fácil trazar una relación compleja, porque basta con que los personajes digan A y luego B y hagan X y luego Y. Para mí, al menos en términos novelescos, la complejidad es otra cosa. Dicho sea de paso, otro punto donde considero que la novela es peliculera es el personaje de Vera Rivken. En cualquier caso, me ha resultado una novela entretenida. Es cierto que he notado escasez de sentido del humor (quizá sea muy sutil, yo qué sé). No es que tenga que haberlo, lo digo más que nada en comparación con Bukowski. También, dicho sea de paso, el realismo —casi surrealismo por momentos— sucio de John Fante me parece bastante menos sucio que el de Bukowski. Quizá, no sé, Fante se daba más importancia a sí mismo —o a su alter ego— que Bukowski.
En cuanto a la forma o prosa de esta novela, decir que no tiene demasiadas florituras, siendo más bien directa y recatada. Eso sí, siguiendo con la comparativa con Bukowski, observo una prosa menos descarnada. En cualquier caso, considero que es una novela bien escrita.
Para acabar, vamos con la típica valoración númerica. Bajo mi punto de vista, es una novela de 7,00 sobre 10. No es una mala nota, pero sí sensiblemente más baja que las que hay por ahí: a 10/10/2024, la media en QuéLibroLeo es de 8,09 sobre 10 (90 votos) y en GoodReads de 4,10 sobre 5 (36371 votos).
[Sepan ustedes que espero traerles tres o cuatro reseñas más en lo que queda de 2024. Pero, como siempre, no les prometo nada.]