martes, 9 de noviembre de 2021

'De ratones y hombres' - John Steinbeck


En esta entrada voy a hablaros de la novela (corta) De ratones y hombres de John Steinbeck, publicada originalmente en 1937. En alguna edición se presenta como La fuerza bruta, algo un poco difícil de entender dado que el título original es Of mice and men. Es la tercera novela que leo de este autor (uno de mis preferidos), pues ya había leído Las uvas de la ira y Al este del Edén, ambas más extensas, ricas y ambiciosas que la que hoy nos ocupa. Comentar también que se ha adaptado cinematográficamente en dos ocasiones (1939 y 1992) y también para un telefilm (1981).


SINOPSIS (la corto enseguida porque, inexplicablemente, cuenta demasiado):

De ratones y hombres narra la historia de Lennie, un deficiente mental, y su compañero y ángel de la guarda George, dos braceros al borde de la indigencia. 


Lennie y George, George y Lennie. Todo gira alrededor de ellos en esta novela, especialmente en torno a Lennie. En el primer capítulo, Steinbeck, después de una bella descripción del lugar, nos los presenta a base de diálogos entre ambos, lo que resulta efectivo y magistral. Enseguida vemos cómo son y cómo es la relación que hay entre ellos, aunque los entresijos de fondo nunca son revelados. Hay quien ve o quiere ver una relación homosexual (no sé muy bien por qué), aunque a mí me parece más bien como si fueran hermanastros. En cualquier caso, me parecen dos personajes lo suficientemente potentes como para llevar ellos solos básicamente todo el peso de la novela.

De alguna manera, tal vez podríamos decir que el tercer personaje de la novela es la propia época, la de la Gran Depresión de los años 30 (como en Las uvas de la ira), ya que tiene un peso importante en la obra. Y es que el resto de los personajes tampoco tienen especial relevancia, a excepción si acaso del único personaje femenino que realmente aparece en la novela (se cita algún otro, como una tía de Lennie), pero este personaje a mí me parece también un poco accesorio.

Alguno dirá: "Bueno, Alberto, pero pasa algo importante con ese personaje femenino." Sí, cierto, hay un hecho trascendental que tiene como protagonista a esta mujer (lamentablemente, se hace spoiler en alguna sinopsis), pero es algo que podría protagonizar -más o menos- otro personaje de la novela sin que el resultado variara demasiado.

Por otra parte, debo decir que ese hecho me resulta un poco gratuito (y casi también lo que pasa después). Para mí, es uno de los problemas de la novela. Desde mi humilde punto de vista, creo que Steinbeck debería haber esperado más -y haberlo hecho de otra manera, claro- a llevar la novela por ese cauce. Tal vez el desenlace de la novela podría haberse producido en otro lugar y/o meses después, pero tengo claro que me resulta un tanto repentino. Quizá Steinbeck pensó que para entonces ya habría quemado a los personajes, yo qué sé. También podría haber argumentado -por decirlo de algún modo- la actitud de George en ese desenlace, porque cuesta un poco entender sus motivaciones. Se puede intuir bastante bien lo que pasa por su mente, pero no sé, no me parece suficiente. No creo que esté del todo bien tratado ni resuelto eso.

Aunque ya no hablemos del desenlace, otra opción para que la novela hubiese resultado más extensa y seguramente más rica y ambiciosa sería hacer lo contrario. Es decir, empezar la novela con lo ocurrido en el lugar de donde venían Lennie y George. Incluso Steinbeck podría habernos hablado de la infancia de los dos, tal vez haciéndonos entender mejor la relación entre ambos, que queda un poco como colgada del limbo.

Comentar también que no estoy de acuerdo con eso de que la novela rezume misoginia. He leído cosas del plan: que si el personaje es muy femme fatale, que si no sé qué. Hombre, a ver, es una mujer de la época y solo una mujer. Quiero decir: Steinbeck no nos habla de cinco mujeres cortadas por el mismo patrón, solo de una. Además, Steinbeck publicó Las uvas de la ira un par de años más tarde, una novela donde aparece un personaje femenino -la matriarca de la familia- que creo que difícilmente podría trazar un autor misógino.

También hay quien habla de que la novela destila racismo. Claro que solo hay un personaje negro. Pero, a ver, ¿cuántos esperabas que hubiese en una novela sobre la Gran Depresión? Es que no trata sobre los campos de algodón del sur de Estados Unidos durante el siglo XIX. Quizá, yo qué sé, nos estemos olvidando que, nos guste o no y por decirlo de alguna manera, el Estados Unidos de los años 30 era un mundo de hombres blancos. Además, no sé, parece que hay gente que piensa que los negros representan el 50% de la población de Estados Unidos. En cualquier caso, no me parece que el personaje negro sea más mezquino, tonto o, de algún modo, desagradable que algunos de los personajes blancos. Es básicamente uno más, más allá de que evidentemente un negro no tenía los mismos derechos que un blanco, y eso es algo que Steinbeck nos deja caer. Incluso esto podría verse como una denuncia. Entonces, ¿dónde está el racismo?

Voy acabando ya, pero, como siempre, quiero hablaros un poco de la forma. Simplemente, comentar que la novela está muy bien escrita, con poca descripción -tanto de lugares o cosas como de personajes- y yendo bastante al grano, sobre todo a base de diálogos (como digo, una forma de acercarnos a los personajes). Así pues, la novela resulta fluida. Desde mi punto de vista, todo ello es un acierto por parte de Steinbeck.

Como valoración final, quiero dejar constancia de que me ha parecido una (muy) buena novela, aunque con algún pero (ya comentado anteriormente). No creo que podamos decir que esté al nivel de Las uvas de la ira o Al este del Edén, sobre todo porque ambas son como más ambiciosas (especialmente la última), pero se acerca. Eso sí, a mi juicio, esto hace poder hablar de obras maestras en el caso de las otros dos y no en el caso de la que aquí nos ocupa. Para mí, por darle una nota, sería un 8 sobre 10 (esto, lógicamente, podría cambiar algo si la valorara habiéndola leído hace un mes o haciéndolo dentro de dos así como después de una segunda lectura).


No hay comentarios:

Publicar un comentario